
Король Испании Фелипе VI и его супруга королева Летисия, прибывшие в Аргентину с визитом, почти час не могли выйти из самолета из-за отсутствия трапа нужной высоты, сообщает газета Vanguardia.
По информации издания, авиалайнер испанских ВВС Airbus с королевской четой на борту прилетел в Буэнос-Айрес около девяти часов вечера в воскресенье. Причем поначалу он еще около 15 минут ожидал свободного места для посадки в аэропорту Хорхе Ньюбери.
После приземления Фелипе VI и королева Летисия должны были выйти из самолета к ожидающей их делегации, в которую входили министры иностранных дел Испании и Аргентины и другие почетные гости. Однако поданный трап не достал до двери лайнера.
Изначально королевский самолет предложили перенаправить в аэропорт Эсейса — другую воздушную гавань аргентинской столицы. Однако в итоге к Airbus смогли подать подходящий по высоте трап и монарх Испании спустился к встречающей его делегации спустя час ожидания.
El Airbus 310 de la Fuerza Aérea Española en el que se desplazaron a la capital argentina aterrizó en el aeroparque metropolitano Jorge Newbery, un aeropuerto ubicado en la misma ciudad de Buenos Aires y en el que habitualmente operan aviones de menor altura y envergadura que los que lo hacen en el aeropuerto internacional de Ezeiza, situado a unos 35 kilómetros al sudoeste de la capital argentina.
Pero los responsables del aeroparque no tuvieron en cuenta el tamaño del avión, y cuando se acercó hasta su puerta la escalera rodante ya preparada para ello, se percataron de que no servía y hubo que retirarla. Por ello, se buscó otra escalera, mientras que entre las delegaciones que esperaban se llegó a comentar la posibilidad de que el avión tuviera que despegar de nuevo para aterrizar en Ezeiza.
No fue necesario, y casi una hora después de que el Airbus de los reyes tomara tierra, se pudo acoplar a su puerta una escalera con las características necesarias y que es la que se usa para el avión del presidente de Argentina, Mauricio Macri.
Con el problema solucionado, los Reyes descendieron del avión poco antes de las 22:00 del domingo, para ser recibidos con honores y saludar a las autoridades que llevaban esperando a pie de pista durante todo ese tiempo.
Felipe VI y doña Letizia se trasladaron después hasta el hotel en el que se van a alojar durante su estancia en Buenos Aires con motivo de la visita de Estado, que concluirá el martes para desplazarse después a la ciudad de Córdoba con el fin de asistir a la inauguración del VIII Congreso Internacional de la Lengua Española.
Su agenda oficial comenzará mañana, lunes, cuando harán una ofrenda floral ante el monumento al general San Martín antes de trasladarse a la Casa Rosada para ser recibidos por Macri y su esposa, Juliana Awada.
Allí están previstas las primeras palabras del Rey y del presidente argentino en esta visita, que en la jornada de mañana incluye una reunión entre ambos, una comida privada de la pareja real, Macri y la primera dama del país, y una cena de gala en su honor.
Felipe VI ha viajado en numerosas ocasiones a Argentina, pero no lo había hecho hasta ahora como Rey. La última vez que estuvo en el país latinoamericano lo hizo como Príncipe de Asturias, cuando en septiembre de 2013 encabezó la delegación que defendió ante el Comité Olímpico Internacional (COI), reunido en Buenos Aires, la fallida candidatura de Madrid como sede de los Juegos de 2020.