
Спад рождаемости более чем на 22% по сравнению с аналогичным периодом прошлого года регистрируют страны ЕС через 9 месяцев после начала весеннего периода всеобщей самоизоляции в марте и апреле 2000 года, 7 марта сообщает El Pais.
Это лишь первые данные о влиянии пандемии на рождаемость. Так, например, пандемия резко снизила уровень рождаемости в Испании в декабре и январе. Согласно информации регистров гражданского состояния, в эти месяцы было зарегистрировано 45 054 новорожденных ребенка, что на 13 141 ребенка меньше, чем в прошлом году.
Это снижение приведет к еще большему снижению рождаемости в стране, которая и так годами переживает сильный спад.
Аналогичные показатели рождаемости регистрируют и другие страны ЕС.
El problema es que llueve sobre mojado. Los 360.617 nacimientos en 2019 suponían la cifra más baja de toda la serie histórica del Instituto Nacional de Estadística, que arranca en 1941, un récord que también alcanzó al primer semestre de 2020. Estas cifras se explican porque ahora mismo hay generaciones menos numerosas de mujeres en edad de ser madres y porque el momento de tener el primer hijo va retrasándose paulatinamente. Pero a esto hay que añadirle ahora las consecuencias sociales y también psicológicas de una pandemia.
Hospitales como Vall d’Hebron o Sant Pau, en Barcelona, atendieron en 2020 un 10% menos de nuevos embarazos y los partos han disminuido al mismo ritmo durante enero y febrero de 2021. En el Hospital La Paz, en Madrid, se registraron en 2020 hasta un 14% menos de consultas a partir de los tres primeros meses de embarazo. Hay centros que no perciben un cambio de tendencia porque la caída de la natalidad ya se venía registrando con anterioridad. Como sucede en el Hospital Miguel Servet, en Zaragoza, donde el jefe de Obstetricia, Sergio Castán, habla de un descenso “del 5% anual” que ya se observaba previamente, o el Hospital Virgen del Rocío, en Sevilla, cuyo director de la unidad maternofetal, Guillermo Antiñolo, cifra en un 40% la reducción de partos atendidos en 12 años: de 9.000 en 2008 a poco más de 5.000 en 2020.
Los datos confirman que hay un fenómeno nuevo sumado al de una caída progresiva de la natalidad. Solo en el pasado enero, el primer mes completo en el que pueden calibrarse las consecuencias del confinamiento, se inscribieron en el registro civil 6.889 bebés menos que el mismo mes de 2020. La diferencia es notable porque en enero de 2020 se registraron 511 niños menos que ese mes de 2019. Si la caída de 2019 a 2020 fue del 1,7%, la de ahora, del 23%. Ahí está la pandemia.