
Такой силы ураганных ветров Испания не знала 21 год, сообщают испанские метеорологи. Впрочем, и такого снега с ливнями, какими ознаменовались конец 2009 и начало 2010, на Пиренейском полуострове не припоминают даже старожилы. Вчера порывы ветра достигали 160 км в час. Особенно ураган бесчинствовал на средиземноморском берегу Валенсии. Раненые люди, поваленные деревья, перевернутые машины, сорванные крыши.
В четверг, 14 января, набережные в городах Валенсия и Кастельон, Ла Корунья и Понтеведра выглядели как после бомбежки. Кроме восточного побережья Испании, ощутимо пострадали северо-западные, атлантические районы Испании, автономия Галисия.
В Галисии ураганные ветры повалили опоры линий высоковольтных передач, что почти на сутки лишило электричества около 230 тысяч жителей этой автономной области. Двенадцать человек получили ранения.
По прогнозу сильные ветры будут дуть в прибрежных районах Испании и сегодня.
Тем временем, синоптики подвели итоги аномального в климатическом отношении декабря в Испании. Оказалось, что в этом месяце в стране выпало в два раза больше осадков, нежели обычно в это время – 155 литров на квадратный метр.
Однако, похоже, наступивший январь, в котором почти две недели по всей Испании шел снег и дождь, может по числу выпавших осадков опередить рекордный декабрь.***
СМИ Испании: Después del frío y la nieve de la semana pasada, el protagonismo absoluto fue ayer para el viento, que azotó a la Comunidad Valenciana con rachas de una intensidad que no se registraba desde hace 21 años -de hasta 160 kilómetros por hora- y provocó incidentes que dejaron tras de sí una decena de heridos, uno de ellos grave.
El vendaval fue tal que no era difícil ver durante la mañana en municipios como la ciudad de Valencia contenedores de basura arrastrados en plena calzada, semáforos oscilando, árboles arrancados de cuajo con las raíces al aire, ramas desgajadas, palmeras tronchadas o esferas de vidrio de farolas descolgadas y estrelladas contra las aceras. Tampoco costaba cruzarse con peatones haciendo equilibrios contra las embestidas del viento, esquivando remolinos de hojas secas, bolsas y papeles o muros tumbados a lo largo de decenas de metros, como el del campo de deportes del Colegio Alemán en la calle de Alemania.
Este escenario tan excepcional, con camiones volcados (en la A-7 o la N-344) o paneles informativos tumbados en plena autopista (en la A-7 en Sagunto) forzó a suspender las clases de 30.000 alumnos y llevó al Ayuntamiento valenciano a tomar medidas tan extraordinarias como el cierre de parques e instalaciones deportivas. Además, se produjo un incendio de 2,5 hectáreas en el Parque Natural del Turia.
Uno de los sucesos más graves se produjo en la calle de Daniel Balaciart, en el barrio de Benimaclet de Valencia. La caída desde diez pisos de altura de un panel de publicidad de grandes dimensiones lesionó de forma grave a una persona y levemente a otra, además de causar daños a seis vehículos, según la Policía Local. El herido permanecía ayer en el hospital Clínico de Valencia con diversas fracturas, según fuentes sanitarias.
Otros dos menores fueron trasladados a centros hospitalarios de la ciudad. Uno, también llevado al Clínico, resultó dañado por una farola en la calle del Padre Alegre y a última hora de ayer ya estaba en casa. El otro, que fue ingresado en La Fe, padeció heridas por el desprendimiento de un tejado metálico en la esquina de la calle de la Paz con la del General Tovar.
En este accidente, hubo otra persona herida, de gravedad, que perdió el conocimiento, según la Policía Local. Algunas fuentes situaron a este paciente en el hospital Clínico. También en la calle de Crevillent resultó herida una mujer al desprenderse parte de una cornisa.
En la provincia de Alicante dos bomberos resultaron heridos en Muro cuando descolgaban un cartel tumbado por el viento. Y en Crevillent, a una persona se le cayó el techo de escayola de su despacho.
Según la Agencia Estatal de Meteorología, hacía 21 años que no se registraban rachas con la intensidad de las que ayer barrieron a las comarcas valencianas. El observatorio de Manises detectó ayer embestidas de 113 kilómetros por hora (en 1989 fueron de 139 km/h). En Xàtiva hubo ráfagas máximas de 111, en Castellfort de 103 y en Valencia de 95.Las fuertes rachas obligaron a cortar la carretera de circunvalación de Alcoi. Además, la autovía se cortó entre las 11.00 y las 12.00 para que los bomberos retirasen las placas de aislamiento acústico que tenían peligro de caer sobre la calzada a causa del viento.
En Castellón, el viento, que superó los 90 kilómetros por hora, provocó que el techado del área de servicio de La Plana, se desencajara y descolgara. Otros puntos de riesgo fueron el paso por el término de Oropesa y la carretera N-340 a su paso por la capital de La Plana.
En la ciudad de Castellón, la caída de cascotes, desconchados de fachada, toldos, árboles, planchas y uralitas de tejados sueltos así como incidentes con cerramientos de naves industriales provocaron el mayor número de salidas por parte de los bomberos.
El teléfono de emergencia de la Generalitat 112 recibió cerca de 15.000 llamadas, según indicó el consejero de Gobernación, Serafín Castellano, quien aseguró que 2.000 profesionales trabajaron ayer para resolver los desperfectos provocados por el viento.
En Valencia, los bomberos tampoco tuvieron apenas descanso, especialmente durante la mañana. Incluso sufrieron en sus propias instalaciones los efectos del vendaval, con la caída de una techumbre metálica de uno de sus parques. También hubo problemas con la cubierta del pabellón Fuente de San Luis de Valencia. Los equipos de baloncesto Power Electronics y Ciudad Ros Casares no pudieron entrenar en la pista central del pabellón.
Además, la maquinaria que trabaja en la zona terrestre del puerto de Valencia se paró por precaución, lo que ocasionó algunas retenciones de los camiones que acuden a las instalaciones a cargar y descargar material. Ante las adversas condiciones meteorológicas, el Ayuntamiento de Valencia decidió cerrar los parques que disponen de vallado y cierre, como medida de prevención ante la posibilidad de que se pudieran producir incidentes de gravedad. Fuentes municipales indicaron que el viento derribó 132 árboles. También se cerraron instalaciones deportivas municipales al aire libre y otras cerradas como la piscina municipal situada en la Alameda.
Unos 30.000 escolares de 20 municipios se quedaron sin colegio ayer, según la Consejería de Educación. Muchos de ellos, de la comarca de La Ribera. Pero también hubo incidentes en otras localidades como el colegio público Miguel de Cervantes de Riba-roja del Turia, donde 300 alumnos fueron desalojados al caer una decena de pinos, algunos de más de 15 metros de altura, en las instalaciones educativas. Asimismo, a causa del viento se produjeron cortes de luz intermitentes en varias poblaciones. Para hoy se espera que el viento tienda a remitir.
По материалам: Europa Press, Reuters, Euronews, AFP, EFE, AP, rian.ru***
Николай Кузнецов, сайт Русская Испания