В Алькала-ла-Реаль (Хаэн) среди руин заброшенной церкви нашли тело 14-летней девушки. По подозрению в убийстве уже задержан 22-летний юноша, сообщает в среду агентство EFE.[slide-anything id=’99269′]
Во вторник поздно вечером в полицию позвонил предполагаемый убийца и сообщил, что расправился с девушкой возле крепости Де ла Мота. Вскоре обнажённое тело девушки с признаками насильственной смерти было найдено в руинах заброшенной церкви. Её личность установлена. Юноша задержан.
И жертва, и убийца — граждане Испании.
Sobre las nueve y media de la noche, un joven de 22 años alertó al servicio de emergencias 112 a través de una llamada telefónica de que había matado a una adolescente de 14 años. No supo decir mucho más entonces. Ni tampoco horas después, cuando la Guardia Civil y la Policía Local intentaban localizar a la víctima, cuyo cuerpo apareció finalmente en las ruinas de la Iglesia de Santo Domingo de Silos, junto a la Fortaleza de la Mota, una zona boscosa situada a las fueras del pueblo.
Según ha podido conocer EL MUNDO de fuentes cercanas a la investigación, el presunto homicida se encontraba tras la detención en estado de shock y fue incapaz de ofrecer información que pudiera aclarar las circunstancias de lo ocurrido.
Ella, K.E.Z., era española, aunque su familia procede de Marruecos. Su presunto asesino también es español, con ascendentes dominicanos. Los dos vivían en Alcalá la Real pero no está claro si mantenían o no una relación.
De momento, el hombre sigue detenido en la comandancia de la Guardia Civil de Jaén y ha ofrecido pocos detalles más sobre si conocía con anterioridad a la víctima o las razones de su agresión. Algunas fuentes apuntan a que no eran pareja y, por tanto, de conocerse anteriormente, su vínculo era circunstancial.
La familia de la adolescente había dado parte de su desaparición y aportando una fotografía que sirvió más tarde para reconocer el cadáver, que podría presentar signos de violencia, aunque de momento los investigadores no han precisado mucho más.
Según ha podido conocer EL MUNDO de fuentes cercanas a la investigación, el presunto homicida se encontraba tras la detención en estado de shock y fue incapaz de ofrecer información que pudiera aclarar las circunstancias de lo ocurrido.
Ella, K.E.Z., era española, aunque su familia procede de Marruecos. Su presunto asesino también es español, con ascendentes dominicanos. Los dos vivían en Alcalá la Real pero no está claro si mantenían o no una relación.
De momento, el hombre sigue detenido en la comandancia de la Guardia Civil de Jaén y ha ofrecido pocos detalles más sobre si conocía con anterioridad a la víctima o las razones de su agresión. Algunas fuentes apuntan a que no eran pareja y, por tanto, de conocerse anteriormente, su vínculo era circunstancial.
La familia de la adolescente había dado parte de su desaparición y aportando una fotografía que sirvió más tarde para reconocer el cadáver, que podría presentar signos de violencia, aunque de momento los investigadores no han precisado mucho más.
