Al finalizar la temporada de verano de 2025, Tamara Falcó, marquesa de Griñón, compartió una serie de fotografías de sus vacaciones en Sotogrande. En este rincón andaluz pasó tiempo junto a su esposo Íñigo Onieva y amigos. Las imágenes publicadas ofrecieron una retrospectiva de su vestuario vacacional, mostrando varios conjuntos cuidadosamente elegidos para las cálidas noches.
En una de las fotos, Falcó aparece junto a su hermana Ana Boyer. Ambas optaron por vestidos largos y blancos para una salida nocturna. Mientras que la esposa de Fernando Verdasco lució un modelo texturizado de escote redondo, Tamara eligió un diseño de silueta ‘halter’. Era una prenda de tejido plisado en tono crema, que dejaba la espalda y parte lateral de las costillas al descubierto, añadiendo un toque de sensualidad al look, sin perder su característica elegancia. Completó su conjunto con sandalias blancas de tacón.
El accesorio central, presente en varios de sus looks, fue un clutch tejido de rafia de la marca Cult Gaia. El modelo, llamado «Jaya» y valorado en 220 euros, es una bolsa rígida de forma ovalada decorada con esferas tejidas. Este complemento se convirtió en un accesorio versátil para sus atuendos veraniegos.
Este mismo clutch aparece en las fotos de una fiesta temática ambientada en la jungla. Para ese evento, la marquesa eligió un llamativo vestido sin tirantes con voluminosas mangas abullonadas, decorado con un estampado en tonos verdes y azules. Este atuendo forma parte de su propia línea de diseño TFP para Cortefiel. El look se completaba con grandes pendientes dorados y un original tocado-diademade rafia con la figura de un ave tropical, que, según ella misma puntualizó, llevó sobre el hombro para ajustarse al dress code.
El tercer conjunto con el mismo bolso consistía en un outfit de Farm Rio. Incluía un top de forma romboidal atado al cuello y una falda midi roja de tiro alto, silueta acampanada y bajo festoneado. El precio del conjunto, adornado con bordados florales en tonos rosas y lilas, es de 282 euros. El estilismo se completó con sandalias transparentes y de nuevo grandes pendientes dorados.
De la misma marca brasileña es también la falda bicolor roja y blanca con estampado de conchas. Esta prenda ya había aparecido en el armario de Falcó el año pasado durante su viaje a Seychelles con Íñigo Onieva. Si en aquella ocasión la combinó con una camisa blanca semitransparente, esta vez la acompañó de una blusa de rayas, creando un efecto visual de vestido único. Como accesorios eligió unos pendientes dorados calados en forma de flor, un bolso metalizado en forma de concha y sandalias planas con hebilla.
Al analizar los atuendos presentados, se puede concluir cuáles son las preferencias de la marquesa en la temporada de verano. La base de su vestuario la conforman vestidos y faldas de largo midi o hasta el tobillo. Estos cortes no solo son universales para distintos tipos de figura, sino que también permiten crear looks elegantes con facilidad. Un ejemplo destacado es otro vestido: blanco, de estilo «adlib», de tirantes, con un escote en V poco pronunciado y corte acampanado.
