
La empresa Velca, especializada en la fabricación de motos y scooters eléctricos, ha realizado una importante actualización de su gama de productos. Gracias a la implementación de nuevas soluciones de producción y a la revisión de contratos con proveedores, el fabricante ha logrado hacer sus vehículos más accesibles para los compradores.
En el segmento de scooters eléctricos, el modelo de entrada ahora es el Bora+, diseñado para ofrecer una autonomía de hasta 75 kilómetros con una sola carga. Al instalar una segunda batería, la autonomía se incrementa hasta 150 kilómetros. El precio de esta versión es de 1.990 euros, lo que permite romper la barrera psicológica de los 2.000 euros para este tipo de vehículos. Otro modelo, el Calima 50, está equipado con un motor de 3 kW y puede recorrer hasta 150 kilómetros sin recargar. Su precio es de 2.790 euros. Ambos scooters están pensados para desplazamientos urbanos, teniendo en cuenta que la distancia media diaria recorrida por los usuarios españoles, según la asociación sectorial Anesdor, no supera los 30 kilómetros.
La gama de motocicletas eléctricas también ha sido renovada. El modelo Tramontana S, con un precio de 3.790 euros, destaca por su autonomía de 90 kilómetros y una velocidad máxima de 90 km/h gracias a su motor de 5 kWh. El Calima S, valorado en 3.690 euros, ha recibido varias mejoras técnicas y se ha convertido en el scooter más accesible con sistema ABS en ambos ejes, lo que aumenta la seguridad y el confort para el conductor.
En la parte superior de la gama se encuentra la Velca ONE, diseñada para una autonomía de 220 kilómetros y capaz de alcanzar una velocidad de hasta 125 km/h. Por 6.490 euros, el comprador recibe un paquete ampliado que incluye entrega, gestión de documentos, baúl SHAD SH33, seguro con una cobertura de 100 euros y el primer servicio gratuito. El modelo Vortex, cuyo precio se mantiene en 7.290 euros, destaca como la única motocicleta eléctrica de estilo custom, dirigida a quienes buscan no solo un medio de transporte urbano, sino también la posibilidad de realizar viajes de larga distancia.
La reducción de precios ha sido posible gracias a tres factores clave: innovaciones tecnológicas que permitieron abaratar baterías y componentes; optimización de procesos de producción, lo que facilitó aumentar el volumen de fabricación; y una gestión interna eficiente que permitió eliminar costes y trasladar el ahorro al consumidor final.






