
A finales de agosto de 2025, en España funcionan 48.070 estaciones públicas de recarga para coches eléctricos. En ocho meses, la red creció casi un 6% respecto al cierre del año anterior. En el último mes se sumaron 477 nuevos puntos, lo que evidencia la continua expansión de la infraestructura.
Se presta especial atención al desarrollo de estaciones de alta potencia. La cantidad de cargadores con potencias entre 50 y 250 kW alcanzó los 4.807, un 76,7% más que en diciembre de 2024. El número de puntos capaces de suministrar más de 250 kW aumentó a 825, lo que representa un crecimiento del 57,1%. También creció el número de cargadores rápidos (de 22 a 50 kW): ya son 9.852, un 17,9% más que a principios de año.
A pesar del crecimiento de estaciones rápidas y ultrarrápidas, la mayoría de los puntos siguen perteneciendo a la categoría de “lentos”. En España hay 13.935 cargadores de menos de 22 kW, un 9% menos que anteriormente. El número de estaciones de 22 kW es de 18.651, lo que muestra un crecimiento ligero del 1%.
La disminución de puntos “lentos” se explica por la modernización: muchos de ellos fueron actualizados a categorías de mayor potencia. Además, parte de las estaciones ya instaladas aún no están en servicio; en julio eran 13.072 en esa situación.
La distribución geográfica de la infraestructura de recarga sigue siendo desigual. Casi la mitad de todas las estaciones se concentran en tres autonomías: Cataluña cuenta con 9.649 puntos, Madrid con 6.904 y Andalucía con 6.792. En un año, estos territorios incrementaron sus cifras en un 20,1%, 14,4% y 14,1% respectivamente.
Al mismo tiempo, en cuatro regiones — Cantabria, Navarra, Extremadura y La Rioja — el número de estaciones no supera las 1.000. Sin embargo, la tendencia a expandir la red entre ciudades y regiones se mantiene, lo que impulsa el desarrollo del transporte eléctrico en todo el país.






