
En España continúan las controversias en torno a los contratos firmados por la empresa del empresario Juan Carlos Barrabés, con la que estuvo vinculada Begoña Gómez. Tras la publicación de un extenso informe de más de trescientas páginas, se ha comprobado que la investigación no ha hecho más que intensificarse. Ahora la atención se centra en cómo se ejecutaron estos contratos y no solo en el proceso de adjudicación.
Se está preparando un nuevo documento que será remitido a la Fiscalía Europea. El motivo es que se trata de fondos procedentes del presupuesto de la Unión Europea. El foco está puesto en tres grandes adjudicaciones obtenidas por la empresa de Barrabés. La cuantía total asciende a 8,4 millones de euros, otorgados por Red.es, la entidad responsable de la transformación digital empresarial en el país.
Anteriormente, los expertos ya habían detectado una serie de irregularidades en la asignación de estos fondos. Según su opinión, el procedimiento se realizó vulnerando la legalidad y el propio esquema podría haberse diseñado de forma que el ganador estuviera previamente definido. Esto permitió que Red.es determinara por sí misma quién recibiría la financiación, sin involucrar a especialistas independientes en el proceso.
En un principio, los auditores se centraron en analizar las fases de preparación y distribución de los contratos. Posteriormente, sin embargo, los investigadores europeos insistieron en examinar todo el ciclo, desde la planificación hasta la ejecución. Les interesa saber si se cumplieron las condiciones contractuales y si los resultados respondieron a los requisitos establecidos.
Debido al gran volumen de documentos y a la necesidad de solicitar aclaraciones adicionales a Red.es, la elaboración del informe se ha retrasado. Las respuestas ofrecidas por la organización no convencieron a los expertos. La mayor preocupación surgió en torno al sistema de evaluación de solicitudes, que benefició a la empresa Barrabés. Los representantes de Red.es explicaron que la evaluación fue «dinámica» y no puede describirse de manera precisa.
Próximamente, los auditores también deberán analizar si las fórmulas de evaluación utilizadas eran habituales en todos los concursos de Red.es o si se aplicaron de forma selectiva. Ya se observa que la parte subjetiva de la puntuación tuvo más peso del declarado oficialmente, lo que pudo favorecer a un participante concreto. La defensa sostiene que esta práctica se empleó en otros casos, por lo que no se trataría de un caso de discriminación.
La investigación sigue en curso y sus resultados podrían afectar no solo el destino de contratos concretos, sino también la reputación de las instituciones estatales encargadas de gestionar fondos europeos. Las dudas sobre la transparencia y objetividad de los procedimientos permanecen sin resolver.






