El puerto de la capital catalana fue testigo recientemente de un acontecimiento destacado en el mundo de los viajes marítimos. A sus muelles atracó el Oceania Allura, el barco más moderno de la flota de Oceania Cruises, que realiza su primer viaje por el Mediterráneo. La embarcación, botada apenas a mediados de julio, hizo una parada en la ciudad como parte de su gira europea debut, despertando un gran interés entre los amantes del lujo y la buena vida.
Oceania Cruises se ha consolidado desde hace tiempo como una compañía que diseña cruceros ‘de gourmets para gourmets’, y con la llegada del Allura, esta filosofía ha alcanzado un nivel completamente nuevo. El equipo de chefs, bajo la dirección del director culinario ejecutivo Alexis Quaretti, renovó por completo el menú a bordo. Como resultado, se crearon más de 270 platos originales pensados para sorprender incluso a los paladares más exigentes. La inspiración para esta reforma culinaria vino de los recuerdos personales del chef y de sus años de colaboración con el célebre Jacques Pépin. Algunas recetas tienen una historia profundamente personal, como el mousse de chocolate ‘Mousse au Chocolat de Mamie Huguette’, preparado según la receta familiar de la abuela de Quaretti. Esta filosofía, que fusiona el respeto por la tradición con técnicas culinarias contemporáneas, se percibe en cada plato, desde el desayuno hasta la cena.
A los pasajeros se les ofrece no solo disfrutar de la comida, sino sumergirse en el mundo de la gastronomía. Con motivo del 15º aniversario del Centro Culinario a bordo, se amplió el programa de «Tours Culinarios de Descubrimiento». Ahora, los huéspedes pueden acompañar a los chefs a mercados locales en los puertos de escala para conocer la cultura auténtica a través de sus sabores. En el propio barco se imparten más de 60 talleres. En cocinas especialmente equipadas, con estaciones de trabajo individuales y equipamiento profesional, cualquiera puede perfeccionar sus habilidades o descubrir los secretos de la cocina nacional bajo la guía de instructores experimentados.
Pero Oceania Allura impresiona no solo por su gastronomía. Este gigante de 70.000 toneladas, diseñado para 1.200 pasajeros, ofrece un nivel excepcional de confort. Las cabinas estándar tienen una superficie de 27 metros cuadrados, superando el tamaño de muchas suites en barcos de otras compañías, lo que garantiza a los huéspedes una sensación de amplitud y privacidad. Tras salir de Barcelona, el barco puso rumbo a Mónaco, desde donde emprenderá un viaje transatlántico de 24 días hasta Nueva York. Posteriormente, navegará por la costa de Canadá y Nueva Inglaterra, y durante la temporada de invierno recorrerá las cálidas aguas del Caribe.
Los representantes de la compañía ya miran hacia el futuro. Roberto Cabello, responsable de desarrollo de negocios de Oceania Cruises, compartió planes para la construcción de dos nuevos barcos de la clase Sonata, que se incorporarán a la flota en 2027 y 2029. Juan Rodero, director de Un Mundo de Cruceros/StarClass, destacó que la alta gastronomía es un lenguaje universal, y que los clientes fieles continúan eligiendo Oceania Cruises precisamente por la constante alta calidad de su oferta gastronómica, lo que consolida el liderazgo de la naviera en este segmento del mercado.
