
En la Comunidad de Madrid arranca un ambicioso programa destinado a superar las dificultades de acceso a la vivienda. El gobierno autonómico ha anunciado el lanzamiento de quince nuevas medidas que buscan facilitar a los ciudadanos la búsqueda de un hogar propio y abaratar los alquileres. Se dará especial prioridad a los jóvenes menores de 35 años y a las familias que atraviesan situaciones complicadas.
Entre las principales novedades destaca la construcción de mil nuevas viviendas destinadas a jóvenes. Estos inmuebles se ubicarán en distintos municipios, incluyendo ciudades como Alcalá de Henares, Villanueva de la Cañada y el barrio madrileño de Aravaca. Así, la oferta total de viviendas para este colectivo alcanzará las 5.500 unidades.
Paralelamente, las autoridades planean aumentar la oferta de alquiler asequible: para 2027 está previsto que el número de estos pisos llegue a 14.000. Para familias en situación de riesgo se crearán además 500 viviendas nuevas, elevando así el total hasta 2.100. También se implantará un distintivo de calidad específico para los inmuebles incluidos en el programa de apoyo al alquiler, con el objetivo de reforzar la seguridad y confianza en estas opciones.
Simplificación de trámites y nuevas oportunidades para los promotores
Una parte fundamental de la reforma será la posibilidad de cambiar la vocación de los terrenos: a partir de ahora, en parcelas que antes estaban destinadas a hoteles, se podrá construir vivienda con apoyo estatal. Además, se incrementa la densidad y la altura máxima de los nuevos proyectos en un 20% y 10% respectivamente, lo que permitirá levantar más edificios sin largas demoras burocráticas.
La reducción de los costes de construcción será posible al disminuir el número obligatorio de plazas de aparcamiento por inmueble: ahora bastará con una por vivienda. Esta medida busca hacer los nuevos proyectos más rentables y acelerar su ejecución.
Apoyo a los compradores y agilización de la burocracia
El programa «Mi primer piso» ahora está disponible no solo para jóvenes, sino también para ciudadanos de hasta 50 años. Han incluido también las viviendas de obra nueva, ampliando así el rango de posibles beneficiarios. Para acelerar todos los trámites se creará un organismo específico que acompañará a los ciudadanos en todas las etapas de solicitud de ayuda y gestión de documentos.
Las autoridades también planean lanzar una «aceleradora urbana» especial, para que los municipios puedan asignar suelo para edificación, otorgar permisos y acortar los plazos de los proyectos con mayor rapidez. Esto debería dar un nuevo impulso al mercado inmobiliario de la región.
Iniciativas legislativas y colaboración con el sector privado
Próximamente entrará en vigor una nueva ley que facilitará el acceso al suelo, agilizará la aprobación de proyectos y ofrecerá mayor seguridad jurídica tanto a inversores como a ayuntamientos. Gracias a la colaboración público-privada, se prevé la construcción de 4.300 nuevas viviendas. Además, en la región se ha inaugurado el primer instituto de formación profesional especializado en edificación y obra civil, para formar a los profesionales que harán realidad estos ambiciosos proyectos.






