
En la costa suroeste de Mallorca se encuentra Cala Fornells, una acogedora cala que atrae a los turistas por sus aguas cristalinas, arena blanca y armonía con la naturaleza. La playa, de unos 80 metros de longitud, forma parte del llamado “triángulo de la virtud”, junto con las playas de Caló de ses Llises y Caló d’en Monjo.
Cala Fornells está rodeada de pinos y acantilados, lo que brinda una sensación de aislamiento incluso estando cerca de hoteles, viviendas y restaurantes. Aquí se puede tomar el sol, y también disfrutar de un solárium artificial situado junto a la playa.
Las vistas panorámicas desde el cabo Punta de na Sardana ofrecen paisajes pintorescos, incluyendo las playas vecinas de Peguera y Santa Ponsa, así como Caló de ses Llises. A pesar de la desarrollada infraestructura turística, en Cala Fornells se mantiene un ambiente tranquilo y limpio, algo especialmente valorado por quienes prefieren evitar las multitudes.
Los aficionados al buceo y al snorkel encontrarán condiciones ideales: el agua transparente y la variedad del relieve marino permiten observar la vida submarina. Para quienes prefieren actividades en tierra, los alrededores cuentan con rutas de senderismo donde se puede disfrutar de la naturaleza y la tranquilidad.
La playa de Cala Fornells también destaca por estar en la frontera de dos municipios, lo que le otorga un carácter especial. A lo largo de la costa hay restaurantes y cafeterías que ofrecen platos de la gastronomía local, así como todos los servicios turísticos necesarios.
Para los navegantes y propietarios de embarcaciones, Cala Fornells está abierta a la entrada de barcos cuando soplan vientos del este, sureste y sur. Sin embargo, para una mayor seguridad, se recomienda utilizar la playa vecina, Caló de ses Llises, que está mejor resguardada del oleaje. A dos millas y media náuticas se encuentra el club náutico de Santa Ponsa, lo cual resulta cómodo para los aficionados a las excursiones marítimas.
La limpieza y el cuidado del entorno de la playa son fruto del respeto por la naturaleza y de la ausencia de turismo masivo. Eligen este lugar quienes valoran la armonía con el entorno y prefieren relajarse en un ambiente tranquilo.
Se puede llegar a Cala Fornells en coche o en transporte público. El trayecto en automóvil desde Palma dura unos 30 minutos por la carretera Ma-1, con salida cómoda hacia la calle Toni Munar Cerda y luego por Carrer de la Talaia hasta la propia cala. En la zona de la playa hay aparcamientos gratuitos, lo que facilita el acceso a quienes viajan en coche.
Para quienes prefieren el autobús, la línea número 102 deja a los pasajeros cerca de la playa en aproximadamente una hora. Desde la parada hasta la costa hay que caminar unos 15 minutos por un entorno pintoresco.
Cala Fornells es un excelente lugar para quienes buscan la combinación de belleza natural, mar limpio e infraestructura desarrollada, pero sin el bullicio de los grandes destinos turísticos. Aquí se puede disfrutar del mar, probar la gastronomía local y simplemente descansar a la sombra de los pinos, disfrutando de la auténtica atmósfera de Mallorca.





