
La noche del miércoles, los habitantes de las zonas costeras y adyacentes de Cataluña recibieron en sus teléfonos móviles un mensaje de alerta. Las autoridades regionales advirtieron sobre intensas lluvias que podrían provocar rápidas crecidas de agua e inundaciones localizadas. Se recomienda encarecidamente no salir de casa excepto por necesidad y mantenerse alejados de los cursos de agua, especialmente cerca de ríos y barrancos.
A pesar de la gravedad de la situación, todavía no se han impuesto restricciones oficiales a la circulación. Sin embargo, desde primera hora del jueves, muchas universidades de la región han suspendido las clases. Solo hay dos excepciones: la Universidad Rovira i Virgili (URV) y la Universidad de Lleida (UdL), donde el horario se mantiene sin cambios. En la Universidad Pompeu Fabra (Pompeu Fabra), las clases se reanudarán únicamente después del mediodía.
El temporal ya ha afectado al funcionamiento del transporte. En las líneas ferroviarias R15 y R14 se registraron interrupciones: en un tramo se derrumbó un muro y en otro, una avería técnica detuvo la circulación de trenes. La línea R2 quedó completamente bloqueada entre Castelldefels y Granollers Centre a causa de un incidente en la estación de Gavà. El resto de los trayectos de cercanías también sufren retrasos y modificaciones en los horarios.
Las lluvias comenzaron durante la noche y, según las previsiones, se prolongarán casi todo el jueves. Los servicios de emergencia y los técnicos permanecen atentos a la evolución de la situación. Las autoridades señalan que la mayor parte de las precipitaciones se desplaza desde el sur de Tarragona hacia el norte de la región, y prevén que, hacia el mediodía, las zonas costeras de Girona y los Pirineos vivirán los momentos más complicados.
Servicios de emergencia en alerta
A primera hora de la mañana, los bomberos ya habían atendido una veintena de avisos y el servicio de emergencias había recibido más de un centenar de llamadas de ciudadanos preocupados. Las autoridades destacan que las lluvias serán intensas pero de corta duración, y el hecho de que la zona de precipitaciones esté en movimiento reduce el riesgo de inundaciones severas. Aun así, Barcelona ha activado el protocolo municipal de alerta debido a posibles problemas con el alcantarillado.
En las montañas de los Pirineos, los meteorólogos prevén las primeras nevadas de la temporada, aunque no se espera que sean intensas. Durante toda la noche y la mañana, el centro regional de coordinación de emergencias opera en modo reforzado. Se pide a la población extremar la precaución, evitar salir a la carretera salvo en caso de necesidad y no estacionar vehículos cerca de cauces de ríos o zonas potencialmente peligrosas.
Las autoridades catalanas siguen monitorizando la situación y están preparadas para reaccionar rápidamente ante cualquier cambio meteorológico. Se recomienda a la ciudadanía estar pendiente de las actualizaciones y seguir las indicaciones de los servicios de seguridad.






