
El 11 de septiembre en Cataluña (Catalunya) hace tiempo que dejó de ser solo una fecha en el calendario. Ese día, en toda la autonomía se celebran numerosos actos dedicados a la Diada, la fiesta nacional que para muchos habitantes de la región se ha convertido en un símbolo de unidad y memoria histórica.
Desde primera hora de la mañana, las calles de Barcelona y de otras ciudades se llenan de banderas, flores y música. Ceremonias oficiales, eventos culturales, reuniones en plazas y parques: todo ello genera un ambiente especial donde pasado y presente se entrelazan. Para unos, esta fecha es una ocasión para reunirse con amigos y familiares; para otros, es una oportunidad de expresar sus sentimientos de manera más personal, por ejemplo, enviando una felicitación a través de mensajería o en redes sociales.
En los últimos años, precisamente las felicitaciones digitales se han vuelto especialmente populares. La gente busca frases originales en catalán para compartir con familiares, colegas o conocidos. Esta forma de expresar apoyo y orgullo por la propia cultura ha resultado ser sencilla y accesible, y sobre todo, capaz de unir incluso a distancia.
Los orígenes de esta celebración se remontan al siglo XVIII, cuando en 1714 Barcelona cayó durante la Guerra de Sucesión Española. A pesar de lo trágico de aquellos acontecimientos, hoy la Diada se percibe como el día en que los catalanes reafirman su identidad y su derecho a la singularidad. Desde 1980, esta jornada está reconocida oficialmente como festiva y cada año reúne a miles de personas en las calles y en el espacio digital.
Para quienes desean felicitar a familiares y amigos, este año se ha preparado una selección de cincuenta frases en catalán con traducción al español. No solo es una forma de alegrar a los seres queridos, sino también una oportunidad para recordar la riqueza y diversidad de la cultura local. Por supuesto, cada uno elige cómo celebrar este día: algunos participan en manifestaciones multitudinarias, mientras que otros prefieren una cena familiar tranquila.
La Diada de 2025 volvió a demostrar que las tradiciones pueden cambiar, pero la esencia de la celebración permanece: es el día en que Cataluña habla de sí misma, de sus raíces y de su futuro.





