
En el mundo de la élite española, donde cada movimiento es observado de cerca por la prensa, hay una figura que logra lo casi imposible: permanecer en la sombra. Elena Cue, esposa del influyente financiero Alberto Cortina, ha convertido la privacidad en un auténtico arte. A pesar de su estatus, rara vez asiste a actos públicos, lo que convierte cada una de sus apariciones en un verdadero acontecimiento.
La reciente aparición de la pareja en la celebración del 50 cumpleaños de Arrianna de Hohenlohe en la casa madrileña de su hermano Hubertus fue otra muestra de su selectividad. Sin embargo, el mayor revuelo lo causó un almuerzo en febrero de 2024, cuando Elena fue vista en el restaurante Horcher de Madrid junto a la reina Máxima de los Países Bajos y sus hijas. Encuentros así son una absoluta excepción para una mujer que prefiere la tranquilidad lejos del foco mediático.
Su esposo, Alberto Cortina, cuyo nombre fue durante años protagonista de las páginas de negocios y sociedad por su tándem «Los Albertos» con su primo Alberto Alcocer, hoy también lleva una vida alejada de los focos. Los años agitados, marcados por un sonado divorcio con Alicia Koplowitz tras su affaire con Marta Chávarri, pertenecen ya al pasado. Su matrimonio con Chávarri, celebrado en 1991, duró solo cinco años y estuvo marcado por el sufrimiento. La repentina muerte de ella en el verano de 2023 fue un duro golpe para la familia.
Elena Cue conoció a su futuro esposo durante una jornada de caza en la finca Las Cuevas. Fue un flechazo inmediato que culminó en boda el 10 de junio del año 2000. Este año, la pareja celebra sus bodas de plata tras haber compartido un cuarto de siglo lleno de armonía y alejado de los escándalos que en su día rodearon al financiero. Su vida en común se ha convertido en un ejemplo de estabilidad y serenidad.
Nacida en 1972, Elena no es solo una figura de la alta sociedad. Tiene una licenciatura en filosofía y notables logros deportivos. En la modalidad de tiro al plato, una disciplina poco común, llegó a ser campeona de España y subcampeona de Europa. Junto a Alberto, ha criado a su hija Alejandra, quien en 2024 alcanzó la mayoría de edad.
Considerada una de las mujeres más elegantes del país, Elena demuestra su lealtad a los amigos en los momentos difíciles. Fue de las pocas que apoyó públicamente a Nuria González tras la muerte de su marido, el financiero Fernando Fernández Tapias, presentándose en el funeral. Se la puede ver en la boda del hijo del presidente de Ferrovial o en la entrega de un prestigioso premio periodístico, pero estas apariciones son la excepción que confirma la regla. El resto del tiempo, su vida transcurre lejos de los focos, alimentando así el misterio que rodea su figura.





