
En Madrid se intensifica una nueva fase de una sonada investigación que involucra a la esposa del actual jefe del Gobierno. El juez Juan Carlos Peinado firmó recientemente un documento en el que comunica que, si el caso sobre la presunta malversación de fondos llega a ser juzgado, será un jurado popular quien lo examine. Este procedimiento está previsto por la legislación española, pero en la práctica es poco habitual, especialmente en asuntos que afectan a las más altas esferas del poder.
La decisión judicial ya ha generado una notable repercusión entre los políticos. La oposición no ha perdido la oportunidad de aumentar la presión sobre el Gobierno, afirmando que estos procesos deben acarrear serias consecuencias para el gabinete de ministros. Por su parte, representantes del Ejecutivo insisten en que las acusaciones carecen de fundamento y que la investigación no tiene base real.
En marzo de 2025, el juez Peinado abrió una línea separada dentro del caso, centrándose en el posible uso indebido de fondos vinculado a la actividad de la asistente de Begoña Gómez en la Universidad Complutense de Madrid. La mayor parte del material se refiere a otras posibles irregularidades, incluyendo corrupción y tráfico de influencias. Como pruebas figuran correos electrónicos proporcionados por un ex vicerrector de la universidad. La defensa rechaza categóricamente estos argumentos y prepara un recurso de apelación.
Por el momento, la investigación formal no ha concluido y la posibilidad de llevar el caso a juicio sigue abierta. En los próximos días, el juez tiene previsto escuchar las posiciones de todas las partes, incluyendo a la fiscalía y a los abogados. El tribunal provincial de Madrid también espera revisar otras reclamaciones relacionadas con este caso. Aunque los juicios con jurado por acusaciones de malversación son poco frecuentes, en la historia de España ya se han producido situaciones similares, sobre todo en casos de resonantes escándalos políticos. Según la ley, el jurado estará compuesto por nueve ciudadanos y el presidente será un juez profesional. La decisión de Peinado no es definitiva y puede ser recurrida dentro de los plazos establecidos.






