
En la ciudad de El Ejido, en el sur de España, la policía llevó a cabo una operación a gran escala en la que desmanteló un importante laboratorio de cultivo de marihuana. Como resultado, una persona fue detenida y en el lugar se hallaron más de 1.300 plantas de esta sustancia prohibida.
Durante el registro de una casa de dos plantas, completamente adaptada para las necesidades del narcotráfico, los agentes encontraron no solo plantas adultas, sino también cientos de esquejes jóvenes listos para su cultivo. En la parte trasera de la finca, en una estructura similar a un invernadero, los efectivos contabilizaron 1.174 plantas en diferentes etapas de crecimiento, así como 135 plántulas frescas.
Además de las plantas, en la vivienda se encontraron numerosos dispositivos técnicos necesarios para el funcionamiento de la plantación clandestina. Entre ellos, potentes aires acondicionados, decenas de lámparas con balastos, sistemas de ventilación, bombas de riego e incluso una motobomba especial para el agua. Todo este equipo fue incautado junto con la cosecha.
Llamó especialmente la atención la forma en que la vivienda se conectó a la red eléctrica: la casa estaba conectada ilegalmente a la línea de suministro, lo que permitía a los implicados utilizar grandes cantidades de energía sin pagar y suponía un riesgo para los vecinos.
El detenido, así como todas las sustancias y equipos incautados, ya han sido puestos a disposición del Juzgado de Primera Instancia de El Ejido. La operación forma parte de una amplia campaña contra el tráfico ilegal de drogas en la provincia de Almería. La investigación sigue abierta y no se descarta que pronto aparezcan nuevos implicados.





