
Surgen nuevos detalles en el caso de la compra de mascarillas médicas para Canarias que podrían cambiar el rumbo de la investigación. Agentes de la UCO (Unidad Central Operativa) han encontrado en dispositivos móviles incautados mensajes que apuntan a un posible encuentro entre el ex presidente autonómico y el actual ministro de Política Territorial con el empresario involucrado en el escándalo de corrupción.
Según la investigación, en el verano de 2020 podría haberse producido en Madrid una conversación entre un alto cargo y el empresario que suministraba equipos de protección individual a las islas. En los mensajes hallados en los teléfonos de los implicados, se habla de un retraso en el pago de un importante lote de mascarillas y se mencionan intermediarios que ayudaron a facilitar el contacto entre ambas partes.
Llama la atención que, justo después de la supuesta reunión, el empresario solicitó a uno de los intermediarios el contacto del presidente regional. Tras recibir el número, le envió un mensaje recordando el reciente encuentro y proponiendo hablar sobre el suministro de test de antígenos. Aunque nunca recibió respuesta, quedó constancia de la lectura del mensaje menos de una hora después.
En el expediente también aparecen mensajes de audio en los que el funcionario relata las dificultades para pagar la factura de las mascarillas. Señala que enfrenta resistencia por parte de una de las empleadas, pero confía en que el problema se resuelva pronto. En conversaciones con otro participante del negocio, se debate la posibilidad de ampliar la colaboración y suministrar nuevas pruebas, y se menciona el contacto con el ministro de Sanidad, quien, según el funcionario, mostró interés en la propuesta.
Ese mismo día, mientras se discutían los detalles de los nuevos envíos, uno de los socios del empresario reenvió una captura de pantalla de la conversación con el funcionario a un chat grupal donde estaban presentes otros participantes de las negociaciones. Los investigadores destacan que el papel del intermediario fue clave en esta historia: no solo facilitó el establecimiento de contactos, sino que, según la investigación, recibía pagos regulares por sus servicios.





