
En Cataluña comienza una amplia transformación digital en el ámbito sanitario: a partir de ahora, los resultados de los exámenes realizados en clínicas privadas se incorporarán automáticamente a la historia clínica digital del paciente en el sistema público. Esta medida busca reducir de forma significativa las largas listas de espera para diagnósticos, que tradicionalmente se mantienen entre las más extensas de España.
Anteriormente, los pacientes que se realizaban pruebas en centros privados a menudo se veían obligados a repetir los mismos procedimientos en hospitales públicos. La razón era sencilla: los sistemas no estaban conectados entre sí y los médicos no tenían acceso a las imágenes ya realizadas. Ahora, gracias a la nueva plataforma, todas las imágenes —desde radiografías hasta tomografías— estarán disponibles para visualizar y descargar en cualquier punto de la red sanitaria catalana.
La plataforma permitirá tanto a los médicos como a los propios pacientes gestionar sus datos médicos. Los usuarios podrán guardar el historial de exámenes, compartir resultados con los especialistas que consideren necesarios e incluso subir imágenes de clínicas que aún no estén integradas en la red general. Para ello será necesario el consentimiento del propio paciente, lo que garantiza un nivel adicional de control sobre la información personal.
El proyecto se lleva a cabo con el apoyo del Institut de Diagnòstic per la Imatge (IDI) y ha supuesto un coste para el presupuesto de casi 1,4 millones de euros. La empresa encargada de la ejecución fue Tecnologías Plexus SL. Las autoridades de Cataluña consideran que esta iniciativa no solo acelerará el diagnóstico, sino que también mejorará la calidad de la atención médica y facilitará el intercambio de datos con otras regiones de España y países europeos.
Próximamente, el sistema estará disponible a través de una interfaz web segura desde cualquier dispositivo. Esto es especialmente relevante para quienes utilizan servicios de compañías aseguradoras privadas: ahora su historial médico no se perderá ni se duplicará. La sanidad catalana apuesta por la integración y la digitalización para afrontar la creciente presión derivada del envejecimiento de la población y el aumento de enfermedades crónicas.






