
La temporada de verano de 2025 ha traído a las playas de Andalucía un fenómeno inusual: dos especies marinas han aparecido en masa cerca de la orilla. Se registran concentraciones de medusas ‘huevo frito’ (Cotylorhiza tuberculata) en aguas costeras, además de la presencia del venenoso dragón azul (Glaucus atlanticus), lo que ya ha provocado el cierre temporal de algunas playas, especialmente en la zona de La Línea de la Concepción.
Los expertos relacionan esto con el aumento de la temperatura del agua en el Mediterráneo y el Atlántico, así como con los cambios en las corrientes marinas. Estos factores favorecen la migración y reproducción de organismos marinos, lo que afecta el equilibrio habitual del ecosistema regional.
Las medusas ‘huevo frito’ se reconocen fácilmente por su forma redondeada y su centro amarillo, que recuerda a una yema. A pesar de su aparición masiva, esta especie es prácticamente inofensiva para el ser humano: el contacto con la piel solo provoca un leve escozor que desaparece rápidamente. No obstante, los especialistas recomiendan, en caso de contacto accidental, enjuagar la zona afectada con agua de mar, no frotar la piel y aplicar una compresa fría. No se aconseja usar agua dulce, vinagre, amoníaco u otros remedios caseros, ya que pueden agravar la irritación. Para desinfectar, se puede emplear una solución de yodo, que puede aplicarse varias veces durante dos o tres días.
A diferencia de las inofensivas medusas, la aparición del dragón azul genera gran preocupación. Este pequeño molusco, de un característico color azul metálico, es capaz de acumular toxinas obtenidas de otros habitantes marinos venenosos, como la carabela portuguesa. Incluso un contacto breve con el dragón azul puede provocar dolor intenso, hinchazón, vómitos y graves reacciones alérgicas, especialmente en niños, personas alérgicas o con problemas respiratorios. Por ello, se desaconseja totalmente tocar o intentar retirar estos moluscos por cuenta propia.
En caso de contacto con un dragón azul, es imprescindible lavar la zona afectada de inmediato con agua de mar o solución salina, evitando el uso de agua dulce. No se debe rascar la piel ni intentar quitar restos del molusco con las manos. Ante dolor intenso, dificultad para respirar u otros síntomas de alarma, es fundamental buscar atención médica urgente. Si se detectan dragones azules en la playa, es importante informar a los socorristas o a las autoridades locales para proteger al resto de bañistas.
Expertos señalan que la presencia simultánea de especies marinas inofensivas y peligrosas está relacionada con el cambio climático y la inestabilidad de las corrientes marinas. En estas circunstancias, se recomienda a los bañistas prestar atención a las advertencias de los servicios de salvamento y seguir las normas de seguridad en el agua.
Las playas de Andalucía siguen siendo un destino popular para los turistas, pero este verano requiere que los visitantes sean más cautelosos y estén bien informados. Los expertos destacan que una información oportuna y el cumplimiento de reglas sencillas ayudarán a evitar consecuencias desagradables y a preservar la salud durante las vacaciones en la costa.





