
Una era en la televisión española ha llegado a su fin. Risto Mejide, el hombre que convirtió el papel de jurado en los concursos de talentos televisivos en un verdadero arte y drama, ha anunciado su retirada. Tras dos décadas ocupando el asiento del crítico más estricto y directo del país, ha decidido que su misión está cumplida. La noticia, que compartió en sus redes sociales, ha causado un verdadero impacto entre millones de espectadores y colegas, marcando el cierre de todo un capítulo en la historia de los formatos de entretenimiento en España.
Acompañó su decisión con una frase breve pero significativa sobre su “último baile”, que interpreta durante la grabación de la temporada actual. Mejide confirmó que su despedida tendrá lugar precisamente en el proyecto «Got Talent España», al que considera el mejor de su género. En veinte años ha evaluado las actuaciones de más de cuatro mil quinientos artistas en los más variados formatos emitidos en televisión. Este camino, según reconoce él mismo, ha sido increíblemente emocionante, y terminarlo en la cima, en un programa tan emblemático, le parece el paso correcto.
Su carrera como juez comenzó en 2006 en el programa «Operación Triunfo». Fue entonces cuando el público vio por primera vez ese estilo implacable, oculto tras las gafas oscuras que se convirtieron en su sello personal. Mejide revolucionó la imagen del árbitro en la televisión: dejó de ser solo quien ponía notas para convertirse en un personaje por derecho propio, cuyos comentarios mordaces y observaciones perspicaces generaban intriga y tensión. A lo largo de los años, trabajó en «Tú sí que vales», «Factor X», «Top Star», pero fue en «Got Talent», donde formó parte del jurado desde 2017, donde su autoridad alcanzó el punto máximo. Para muchos concursantes, recibir su ansiado “sí” era equivalente a la victoria.
La salida de Mejide se produce en medio de importantes cambios en el propio show de Mediaset. Recientemente, otros veteranos del jurado también abandonaron el proyecto, incluyendo a Edurne, Tamara Falcó y Florentino Fernández. En la nueva temporada, los nuevos compañeros de la única que permanece, Paula Echevarría, serán los recién llegados Carlos Latre y Lorena Castell. Así, la cadena renueva prácticamente por completo el jurado.
Cabe destacar que Mejíde ya había contemplado la idea de marcharse en el pasado. Ya en 2024 insinuó que estaba cansado de la necesidad de emitir veredictos de forma constante. Compartió que el rol de jurado se había vuelto una tarea agotadora y que esa etapa de su vida ya había terminado. Comentó que se siente mucho más cómodo escuchando que juzgando. Ahora, esas palabras han cobrado pleno sentido. El comunicador tiene la intención de centrarse en proyectos donde prevalezca el diálogo y no la crítica. Su programa de entrevistas de autor, «Viajando con Chester», en el canal Cuatro, es una clara muestra de ello.
Risto Mejíde se despide tal y como llegó: fiel a sí mismo, sin buscar aprobación ni pedir disculpas. Su adiós carece de dramatismo; es una decisión ponderada y madura. Sin embargo, supone una gran pérdida para la televisión española. Cubrir el vacío que deja tras su marcha será una tarea sumamente complicada. Su ironía, su provocación calculada y la habilidad de decir lo que otros callan eran a menudo el motor principal del programa. Encontrar una figura comparable en magnitud y carisma será un verdadero reto para los productores.





