
El miércoles 15 de octubre, se espera en España una amplia oleada de protestas relacionadas con la situación en Oriente Próximo. Para este día, en todo el país están programadas huelgas y manifestaciones organizadas en apoyo al pueblo palestino. Las acciones abarcarán no solo las grandes ciudades, sino también pequeños municipios, y contarán con la participación tanto de trabajadores como de activistas de distintos movimientos.
El sindicato CGT es el principal impulsor de la huelga general y ha llamado a la sociedad española a mostrar solidaridad con los habitantes de la Franja de Gaza. La organización insiste en la necesidad de poner fin a las acciones militares y exige a las autoridades centrar los esfuerzos en el desarrollo de programas sociales en lugar de financiar conflictos armados. Según los representantes sindicales, lo que ocurre en la región no debe pasar inadvertido para la sociedad europea.
Ese mismo día, los principales sindicatos del país, CCOO y UGT, propusieron a los trabajadores sumarse a paros en tres franjas horarias diferentes: de dos a cuatro de la madrugada, de diez a doce del mediodía y de cinco a siete de la tarde. Este formato permite que empleados de distintos turnos expresen su postura sin que se detenga por completo la actividad laboral. En varias empresas se prevén asambleas donde los participantes debatirán la situación en Gaza y presentarán demandas para el cese de la violencia.
En Madrid y otras ciudades se esperan marchas y concentraciones multitudinarias. Los organizadores destacan que su objetivo es llamar la atención sobre la catástrofe humanitaria y lograr un alto el fuego inmediato. En los próximos días, el 18 y 19 de octubre, se han convocado nuevas acciones: en más de doscientos municipios se celebrarán manifestaciones y, en la capital, tendrá lugar una gran movilización que partirá de la Puerta del Sol el sábado por la mañana. Los participantes quieren manifestarse contra cualquier forma de violencia y exigir libertad para Palestina.
En general, octubre promete ser un mes de intensa movilización social en España. Sindicatos y asociaciones ciudadanas confían en que su actuación obligue a las autoridades a reconsiderar sus prioridades y prestar atención a los problemas de paz y seguridad. Se espera que miles de personas se sumen a las protestas en todo el país.





