
España continúa enfrentándose a una lucha a gran escala contra los incendios forestales, que desde hace varias semanas no dan tregua a los habitantes de varias regiones. La situación más complicada persiste en Galicia, Castilla y León, Extremadura y Asturias, donde actualmente se registran cerca de veinte focos importantes de incendio.
En los últimos días, la tan esperada mejora llegó: las temperaturas han descendido y en algunas zonas ha llovido. Esto ha permitido a los bomberos y servicios de emergencia contener con mayor eficacia la propagación del fuego. Según los meteorólogos, en las próximas horas las condiciones meteorológicas seguirán siendo favorables para la labor de los equipos de emergencia.
A pesar de la mejora, las consecuencias de los incendios han sido catastróficas. Desde mediados de agosto, cuando se declaró la alerta máxima, más de 33.000 personas se han visto obligadas a abandonar sus hogares. La superficie total calcinada en todo el país supera las 400.000 hectáreas, lo que convierte este año en el más grave en número de incendios desde 2006.
Para la tarde del jueves, seguían activos en el país 20 incendios clasificados como especialmente peligrosos. Al mismo tiempo, a medida que el fuego retrocede, aumenta la tensión en la sociedad y en la política. Representantes de diferentes partidos se acusan mutuamente de una gestión ineficaz y de falta de preparación ante emergencias. En particular, se ha intensificado la polémica entre la dirección de protección civil y las autoridades regionales de Galicia, Castilla y León y Extremadura.
Entre las zonas más afectadas se encuentran Asturias, León, Palencia, Zamora, Cáceres y Orense. En estas provincias, la superficie quemada varía desde varios miles hasta casi 45 mil hectáreas. La Fiscalía de Medio Ambiente y Urbanismo ha iniciado una investigación para determinar si se produjeron irregularidades en la implementación de los planes de prevención de incendios.
Los incendios han vuelto a agravar el problema de la despoblación rural: casi el 90% de las localidades afectadas han perdido habitantes en las últimas décadas. En los últimos días, las fuerzas de seguridad han detenido a 40 personas sospechosas de estar implicadas en el origen de los incendios, y otras 119 están siendo investigadas.
En Extremadura, la situación más complicada se registra en la zona de Jarilla (Cáceres), donde en nueve días el fuego ha destruido unas 17 mil hectáreas. Las autoridades siguen controlando focos activos, incluyendo áreas cercanas a Salamanca. En Castilla y León permanecen 25 incendios, ocho de ellos considerados especialmente peligrosos, aunque en algunos municipios ya ha comenzado la evacuación gradual de los residentes de regreso a sus hogares.
En Galicia, donde desde el inicio de la temporada de incendios se han quemado más de 88 mil hectáreas, la situación se va estabilizando poco a poco. En la provincia de Pontevedra se han implementado medidas de seguridad adicionales. Las autoridades regionales instan a no bajar la guardia y preparan planes para reducir el número de especialistas implicados en la extinción a medida que los focos son controlados.
En Galicia continúan las protestas contra las medidas adoptadas por las autoridades para luchar contra los incendios. En 26 ciudades y pueblos se celebraron manifestaciones en las que los participantes exigen acciones más efectivas. Preocupa especialmente el incendio de Larouco, ya considerado el mayor en la historia de la región y que amenaza el parque natural de O Courel, protegido por la UNESCO. Más de 30 mil hectáreas han sido arrasadas por las llamas y se prevé que el fuego siga propagándose.
En Asturias, las lluvias han contribuido a disminuir la intensidad de los incendios, pero cuatro focos importantes, incluido el área de Degaña, siguen activos. Se espera la visita del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, quien tiene previsto conocer la situación de primera mano y mostrar su apoyo a los servicios locales.
España ha recibido ayuda de otros países europeos: a Galicia llegaron 51 bomberos procedentes de Rumanía y a Asturias, 20 especialistas de Grecia. Comenzarán a trabajar en los próximos días. La dirección de Protección Civil subraya que todos los recursos estatales siguen plenamente preparados para combatir el fuego.





