
Los problemas de movilidad urbana siguen siendo una de las principales causas de descontento entre los habitantes de España. Según datos recientes, alrededor del 80% de los ciudadanos están convencidos de que las dificultades para desplazarse por la ciudad afectan negativamente a su calidad de vida. Esta percepción es especialmente marcada en regiones como Madrid, Cataluña y Andalucía, donde la proporción de insatisfechos supera la media nacional.
En Madrid, el 87% de los encuestados declaró sufrir un impacto negativo de la movilidad urbana en su vida cotidiana. En Cataluña, este porcentaje es del 81%, y en Andalucía — casi del 80%. Los habitantes de estas comunidades autónomas se enfrentan con mayor frecuencia a problemas relacionados con el transporte, lo que repercute en su estado emocional y en los niveles de estrés.
Con el inicio del otoño y el regreso a la rutina laboral, el nivel de estrés asociado a los desplazamientos urbanos aumenta notablemente. Tras las vacaciones de verano, muchos vuelven a encontrarse con las dificultades habituales: atascos, búsqueda de aparcamiento y la necesidad de dedicar más tiempo al trayecto. Esto genera una tensión emocional adicional, especialmente entre quienes utilizan su vehículo privado a diario.
El estudio también revela que el 40% de los españoles prefiere desplazarse por la ciudad en su propio coche, moto o bicicleta, y la mayoría lo hace en solitario. Un 23% de los encuestados opta por caminar, mientras que el transporte público es elegido por el 20%. Así, el vehículo privado sigue siendo el principal medio de movilidad, a pesar de las molestias que conlleva.
Entre las principales causas de insatisfacción, los españoles señalan el excesivo tiempo que se dedica al trayecto y a la búsqueda de aparcamiento, según indica más de un tercio de los encuestados. Casi la mitad de los residentes dedica entre media hora y una hora para ir al trabajo o a los estudios en un solo sentido. Además, alrededor del 35% afirma que los desplazamientos urbanos les generan estrés y una sensación de cansancio. Otra preocupación importante sigue siendo la contaminación del aire, que afecta negativamente a la salud de los ciudadanos; en esto han reparado el 28% de los participantes en la encuesta.
Las situaciones que más molestan a los españoles son los retrasos provocados por los atascos (casi el 50%) y la imposibilidad de encontrar plaza de aparcamiento (47%). También figuran entre las causas frecuentes de malestar la necesidad de acudir al taller y los retrasos en el transporte público.
Los expertos señalan que los retos de la movilidad urbana van más allá de la infraestructura y están directamente relacionados con el bienestar emocional y físico de la población. Por ello, los especialistas subrayan la importancia de buscar soluciones que permitan reducir los niveles de estrés y hacer los desplazamientos urbanos más cómodos para todos los residentes.





