
En junio de 2025, la policía española llevó a cabo una amplia operación en la que fueron detenidas 13 personas sospechosas de pertenecer a la primera célula en el país de la organización criminal internacional Tren de Aragua. Esta banda, originaria de Venezuela, es conocida por su violencia y el alcance de sus actividades delictivas en países de América Latina.
Las detenciones se realizaron simultáneamente en varias ciudades: ocho personas fueron arrestadas en Barcelona, dos en Madrid y el resto en Girona, La Coruña y Valencia. Cuatro de los detenidos ya han sido enviados a prisión preventiva por orden judicial. Durante los registros, la policía encontró dos laboratorios clandestinos donde se fabricaba el llamado ‘cocaína rosa’ (tusi), además de incautar drogas sintéticas, cocaína y toda una plantación de marihuana instalada en un local.
Cómo se formó la red del Tren de Aragua en España
La investigación comenzó en marzo de 2024, cuando fue detenido en Barcelona el hermano menor del líder de la banda, conocido como Niño Guerrero. Era buscado a nivel internacional por terrorismo, tráfico de personas, de armas, extorsión y blanqueo de capitales. Tras este arresto, la policía empezó a investigar si Tren de Aragua intentaba asentarse en España y establecer aquí sus actividades delictivas.
Durante la investigación se descubrió que la estructura del grupo en España estaba claramente organizada: el líder tenía un lugarteniente y, bajo su mando, operaban dos células dedicadas respectivamente a la producción y distribución de tusi, así como al tráfico de cocaína. El dinero procedente de la venta de drogas se destinaba a financiar las actividades futuras de la banda.
Amenaza transnacional: historia y expansión del Tren de Aragua
Tren de Aragua surgió en Venezuela entre los obreros que construían el ferrocarril entre los estados de Aragua y Carabobo. Al principio fue un sindicato, que pronto se transformó en una estructura dedicada a la extorsión y, tras la paralización de la obra, en una organización criminal consolidada. Para 2013, cuando Niño Guerrero ingresó en la prisión de Tocorón, la banda ya estaba plenamente conformada y había comenzado a expandir su influencia.
Desde 2018, el Tren de Aragua ha extendido activamente sus operaciones por países de Sudamérica, siguiendo las rutas de los migrantes venezolanos. La organización ya se ha asentado en ciudades de Colombia, Perú, Chile y otros países de la región. Ahora, según la investigación, intentaba establecerse también en España, usando una red ramificada y métodos contundentes para intimidar a la competencia.
Investigación en curso y cooperación internacional
Las autoridades españolas siguen analizando el material incautado y tratando de identificar posibles vínculos de los detenidos con otros miembros de la banda, incluso fuera del país. En la operación participaron también fuerzas de seguridad extranjeras, lo que resalta la dimensión internacional de la amenaza. La policía no descarta nuevas detenciones ni la revelación de más actividades del Tren de Aragua en territorio español.






